Nosotros, los “humanos”, los que poseemos la tecnología, los avances médicos, las mejores oportunidades y recursos, los que soñamos con un mundo mejor, los que somos “libres”. Los “civilizados”.
Compramos tierras, no cuidamos los ríos, ni a nosotros mismos, contaminamos el aire que nos permite seguir vivos, talamos indiscriminadamente los árboles que eliminan el dióxido de carbono sobrante y nos proporciona oxígeno, maltratamos a la fauna que nos debería acompañar durante todo nuestro camino y ya de paso destruimos el camino, no para crear otro, si no para estancarnos en el mismo lugar, curiosamente, el mismo desde el que no se ve ni la puesta de sol ni el amanecer.
Nos guiamos y dejamos dirigir por trozos de papel de colores y por círculos de metal con un dibujo impreso.. Quien más papel y círculos tenga más influyente será en la sociedad, y más valor tendrá su opinión que debería ser como cualquiera de las nuestras.
Nosotros, los grandes reyes del mundo, los dominadores de todo ser, a todos nos comemos y nadie nos come, la raza sin medio diría yo.
Nosotros, los grandes reyes del mundo, los dominadores de todo ser, a todos nos comemos y nadie nos come, la raza sin medio diría yo.
¿Quién cuida a la Tierra sobre la que planta su choza como si fuera su hermana, quién cuida al río como si fuera suyo (que no lo es, ni nuestro tampoco), quién enseña a sus hijos a valorar el medio ambiente sobre todas las cosas? Ellos.
Acabo de generalizar el lado negativo de todo ser “civilizado” pero también los hay buenos, no creáis que no.
Todavía existe aquel que sobrepone al humano antes que a los billetes, y aquel que trabaja día a día para conseguir descubrir algún recurso que no nos contamine ni nos mate lentamente al mismo tiempo que lo utilizamos, todavía existen los “extraños” como dije en el anterior texto, y si de alguna cosa estoy más que orgullosa, es de todos ellos.
“La gente que odia a gente por ser gente, desde luego, no son personas..”
2 comentarios:
Difícil concepto ese de la civilización.
En cuanto el ser humano se tiene que poner de acuerdo para convivir y compartir unos recursos por el bien de todos, se considera que aparece la civilización.
Pero por cruel que parezca, tanto el altruismo como el egoísmo son sentimiento intrínsecamente humanos. Tanto la hospitalidad como la violencia. Tanto el odio como el amor.
Son sentimientos todos ellos que nacen de nuestro cerebro humano. Aunque no nos parezca correcto, aunque nos horrorice que ambos extremos sean igualmente naturales, así es en realidad. Fruto de nuestra evolución, tanto biológica como cultural.
Una labor importante, por tanto, es defender esos valores que consideramos más "humanos", entendiendo como humanos no los naturales (todos los son) sino aquellos que defienden a todos por igual, respetan cualquier vida humana por encima de toda ideología y consideran la libertad como un derecho igual para todos.
Pero hay que ser realistas. Los valores contrarios siempre estarán también presentes. No soy experto, pero creo que la ideología asiática del Yin y el Yan se basaba en esto.
¿Te sientes bien defendiendo tus ideales y te sientes mal cuando observas lo contrario?
Entonces, estás haciendo lo correcto.
Casi todo, diría yo, tiene, en esta vida, lados buenos y malos, y normalmente, hacer un balance del peso de ambos lados dependería mucho de lo que nosotros pensemos, demasiado subjetivo, se podría decir..
¿Es bueno que exitan esas dos caras, la positiva y la negativa? Yo diría que sí, pues lo buenos sin lo malo no es tan bueno, y lo malo sin lo bueno tampoco. Variedad, aunque no nos guste.
Si ambos lados son naturales.. ¿No es malo el rechazo a un sentimiento natural e intrísticamente humano? Sé que en cuanto a extremos poco hay correcto y equilibrado, y que aquí, supongo, se incluirán los pensamientos de la persona en cuestión..
Algo que me parece que indica bastante bien que todavía no somos ni estamos totalmente civilizados es que hemos de tener los derechos impresos en papel y delante de nuestras narices para valorarlos, tenerlos en cuenta y aplicarlos. Hacer la vista gorda cuando nos conviene como si un papel de color blanco se tratara.. Eso no es lo que deberíamos hacer si de verdad fuéramos nosotros los civilizados de verdad.
De hecho, creo que hay algo muy importante en la vida de todo ser humano que es saber que lo que hagas nunca caerá en saco roto porque siempre estará la redecilla del final, la del sentirse bien con uno mismo.
Menos mal que he estado todo el texto generalizando y que hay excepciones, como en toda regla que se precie.
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