lunes, 28 de febrero de 2011

No tengas prisa..

Vive, paso a paso, pero hazlo. Mira atrás si crees que es lo correcto, acuérdate de volver a girar la cabeza para poder seguir mirando hacia delante, siempre.. Grita si te apetece, pero no en el oído de un compañero.. si necesitas contar algo, susurra, pero que se te oiga..
No duermas si no tienes sueño, hay demasiadas cosas por ver y por hacer, te arrepentirás.. Conforme pase el tiempo valóralo más, pues cualquier presente será pasado, y cualquier tiempo pasado te parecerá mejor.. Disfruta de los crepúsculos al igual que de los ocasos, sin que nada importe más que el propio disfrute del momento. Si por lo que fuere el viento amenazara fuertemente, pon un molino a trabajar, saca provecho de toda situación.. Si el agua intimida con su ausencia, búscala más abajo del subsuelo, pero nunca te rindas, nunca pares.
Si te caes, levántate.. y aprovecha lo que puedas de la caída. Trepa las montañas más altas, si hace falta, con lo dientes, contempla después el más hermoso de los regalos que alguien o algo nos brindó. Si la muerte acecha, no llores, regocija, pues significará que en algún momento tuviste vida.

sábado, 26 de febrero de 2011

Otro punto de vista, otro más..

Otra vez tropiezo con la misma piedra, se nota que soy humana. Otra vez las mismas preguntas sin respuestas, si las tienen se esconden muy bien, quizás bajo la piedra con la que siempre tropiezo y en la que nunca miro por miedo supongo, por indiferencia o incluso conformismo.. Las piedras son eso, piedras, pero a veces, estos objetos inanimados son más que simples y llanos objetos.. Puede ser, para mi sorpresa, pues, que el obstáculo sea solución, en parte. Después de todo.. la muerte es un síntoma de que hubo vida..

jueves, 24 de febrero de 2011

Camino y vida. Vida, camino y mochila.

Y eché andar, sin que nada importara, sin mirar atrás, sin rumbo fijo pero con una sonrisa en la boca, quizás no pensaba en nada, lo mismo pensaba en todo, pero sea lo que fuere ni me daba cuenta, ni me interesaba, iba escuchando música, dando saltos, sí, y gritando a los cuatro vientos.. lo recuerdo bien. De repente me encontré con una hoja en el suelo, tenía una forma curiosa y era bonita, la metí en la mochila, seguí caminando, a pesar de no saber cuánto camino me quedaba por recorrer. Vislumbré un puente, allá a lo lejos, tampoco importaba, iría, llegaría allí tarde o temprano, pero llegaría. Me quedaban apenas escasos minutos y tropecé con una piedra haciéndome un rasguño así en las palmas de las manos y en las rodillas, creo, no me preocupé de mirar, tenía demasiadas cosas por ver, por disfrutar. Llegué al puente, la diferencia de altura con respecto al río de abajo era increíble, así que me senté en el abismo mientras tarareaba mi canción favorita. Habían unas vistas preciosas, tales que si las dibujara ahora mismo podría ser, mi dibujo, un fiel reflejo de lo visto aquel día, en ese maravilloso lugar, cuyo nombre resulta tan impronunciable que casi prefiero no acordarme..
Dentro de la mochila llevaba una cámara de fotos, la cuál haría las capturas que nunca llegaría a ver de nuevo, no me hace falta, me levanté otra vez (pues es obligatorio) y seguí andando. Curiosamente, al dar siete pasos me encontré con un muro, duro, rígido, casi irrompible, por un momento me planteé dejarlo como estaba, e incluso caer en el abismo, me senté encima de la mochila y noté un pinchazo, miré dentro de la misma, y.. sí, era un pico. Y a picar se dijo, rompí el muro, aunque la mayoría de los escombros siguieron viajando conmigo. La mochila pesaba más y más cada vez, así que pensé tirarla por el puente, sin más. Acto seguido, desperté.

sábado, 19 de febrero de 2011

El tiempo en sus manos..

Tiene los ojos cansados y un brillo incesante en su interior, desprenden fuerza, vida, puedo ver el cielo en ellos. Ojos verdes, azules, amarillos, quizás transparentes como la mar, como su amor, qué más da.. Ojos viejos, agotados y a la vez serenos, tranquilos, ya han vivido lo vivido, saben pues que les espera, tarde o temprano, un descanso largo y tendido. Sus arrugas demuestran valía en esto de existir, también sabiduría, inmensos instantes en el mismo planeta, no creo haber sentido jamás envidia tan sana. Tuve la oportunidad de agarrar sus manos, secas, agrietadas por el frío del rocío en una dura mañana de trabajo en el campo.
No sé exactamente qué se le pasaba por la cabeza en ese momento, tampoco sé si sabía que estaba allí, con ella, aunque eso no importa ahora. A pesar de permanecer en la cama, transmitía fortaleza y ánimo.. Sé que si derramó alguna lágrima fue la más hermosa de entre todas ellas, sé que si esa lágrima tuvo el valor de salir y resbalar por la, ahora, desgastada mejilla de la mujer que yacía tumbada a mi izquierda, fue únicamente de alegría y regocijo, pues no experimentó pena, por lo menos, no delante mía. Ésta donadora de vida me protegió de la malicia de la humanidad, luchó contra viento, marea y tempestad.
Recojo, sin querer queriendo, los pétalos de la rosa marchita que ahora, sin más, vislumbro allá, en el horizonte, con intenciones de partir hacia no sé dónde, hacia algún lugar. Puedo afirmar, sin hipótesis ni suposiciones cojas, que ésta mujer no viaja sola.. puedo asegurar, también, que mis huellas le acompañaran, para que cuando yo me vaya sepa en qué lugar está..

viernes, 18 de febrero de 2011

Pequeños detalles, grandes momentos..

Hoy me he dedicado a observar, observar todo lo que pasa, acciones, palabras y miradas. Todos las risas, todos los llantos, los perfectos desperfectos y las más precisa incoherencia.  He mirado el cielo y el sol, ambos me han dicho que están aquí para que viva más allá de convicciones inconexas que no llevan a más que a la confusión, y eso voy a hacer:
He respirado aire, he devorado sueños, he disuelto emociones en un momento y las he creado en tres, sin ir más allá de luna, no me quiero congelar, aquí se está muy calentito..
Me he puesto al nivel de hormigas trabajadoras y calladas, a nivel de perros obedientes, a nivel de mariposas libres y de humanos extraños, pero humanos, que es lo que importa. He sido capaz de sentir cien veces una misma caricia, sin necesidad de hartarme, pues ahora mismo, así como estoy, lo volvería a hacer, pero tengo demasiadas cosas que crear.
Me he dejado llevar al compás del ritmo más hermoso jamás oído, he gritado a los cuatro vientos, sin llegar a molestar a ninguno, que vivo conforme a mí y a  mis demás personalidades, porque no tengo una sola, tengo trescientas, trescientas una, quizás, quién sabe.
He imaginado, también, cómo el agua flotaba y a nadie le sorprendía, los pájaros ladraban y yo les hacía palmas, mi perro cantaba al son de una guitarra fantasma, y todos les hacían palmas. Todos éramos todos y nadie era nadie, todo eso en una tarde. Para que veamos que hay más que desesperación en éste mundo.

Un saludo con treinta y cuatro manos que os mando y un vaso de abrazos, por si acaso.

jueves, 17 de febrero de 2011

Pasotismo

Inocencia, inocencia es lo que le falta a esta sociedad. Nadie, y mirad que no me gusta generalizar, tiene ganas de nada, mejor dicho, queremos hacer poco y que nos den mucho. Esto está consiguiendo que, paulatinamente, tenga una visión muy pesimista del mundo. Tampoco me gusta el pesimismo, no me gusta mirar por la ventana y ver como, nosotros, los jóvenes, echamos a perder el futuro, de una manera increíblemente acelerada.  No me gusta ver cómo se echan a perder vidas y sueños que antes brillaban como la más grande de las estrellas.
Queremos crecer demasiado de prisa fumando a los 12 años y bebiendo a los 13, por eso, cuando llegamos a los 18 estamos asqueados de la vida. 
Falta humanidad y sobra hipocresía, faltan buenos deseos y sobra malicia, faltan personas y sobra gente.
Me gustaría conocer a todos lo de mi edad, y poder hacer así un balance fiable y una crítica constructiva seguidamente. Pero me es prácticamente imposible. Veo cómo pasan los días y nadie hace nada por nadie, cómo humanos hacen daño a humanos, cómo nos odiamos, cómo nos destruimos poco a poco, y me temo, irremediablemente.
Me gustaría un día, poder abrir éste blog y decir alto y claro que me había equivocado, que la humanidad no está tan mal como yo creía y decía..  me gustaría mucho, muchísimo, pero no puedo, porque estaría mintiendo, por lo menos, ahora no puedo.

Aunque no sólo ocurre en los jóvenes de hoy en día, únicamente tenemos que echar un vistazo a la política, no sé muy bien cómo está en otros países, pero aquí, aquí da pena, y no, no me refiero a la crisis, me refiero al ansia de poder y a la hipocresía que antes mencionaba. Veo cómo un país cae por puro orgullo, en vez de unir las fuerzas para luchar contra la injusticia, la aumentamos, provocamos, metemos cizaña, y nadie es capaz de tragarse su ego, nadie. Yo no tengo poder, no lo quiero, por lo menos, no el político, tampoco quiero dinero para mí, quiero dinero para lo que realmente lo necesitan. He hecho los cálculos, con mil euros al mes, aproximadamente, una persona puede vivir más o menos de manera decente, ahora, ¿Me puede explicar alguien qué hace una persona con millones de euros mientras que otras personas mueren de hambre? Si alguien lo sabe, que me lo explique, porque no lo entiendo. Sólo veo codicia, lujuria, traición y violencia, lamentablemente.

No quiero perder la fe en la sociedad, confío en que esta se desintoxique y reinserte algún día no muy lejano.. Suerte tendré si lo veo.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Etiquetas..

No sé por qué, pero últimamente sólo me dedico a hacer críticas a la sociedad, supongo que será porque estoy lo bastante cerca de ella como para saber qué se cuece por estos lares, supongo también que no me gusta nada. Digamos que no son críticas muy constructivas, pero bueno, lo son.
Si hace poco me metía con el termino normal hoy me meto con las etiquetas que todos, me incluyo (aunque quiera no hacerlo), ponemos y dejamos que nos pongan. Y sí, sé que no puedo hacer nada, y que lo poco que hiciera no serviría de menos que nada.. aunque esto sea así, porque así es sólo puedo decir que no caeré en clasificar a clases sociales por condición, no dejaré que nadie me imponga etiquetas para anclar mi vida a un guión de papel, y no dejaré que nadie me diga que jamás que nunca alcanzaré la cima que quiero ascender.

Hoy no tengo mucho que decir, así que dejo ésta canción por aquí, a ver si os dice lo que a mí no me sale:


martes, 15 de febrero de 2011

Realidad fría..

Pobre aquel que no conozca el amor y sí su definición. Pobre aquel que pueda explicar con palabras lo que es la felicidad, pobre aquel que no sepa vivir y que por vivir haga el acto de existir indiferente ante una realidad que nos concierne a todos. Realidad diferente y extraña, realidad alegre.. no, más bien.. yo diría amarga. Realidad penosa y extraña, capaz de ocultarse bajo las piedras a siete metros bajo el suelo, realidad tímida y mentirosa. Realidad entre rosa y espada, realidad callada. Pobres aquellos que pasen por la realidad impasibles y tibios pues, cuando despierten, si lo hacen, en ella encontrarán el puñal más frío, el puñal más doloroso que jamás atravesó sus espaldas..
Dichosos los ojos conscientes, dichosos, de alguna otra manera, los que carecen de ellos.

domingo, 13 de febrero de 2011

Diario de un cuarto de vida:

Viernes, 5 de agosto de 2010:
Sigo en el hospital de campaña, con vanas esperanzas, llevo tres días sin probar una gota de agua. Ayer una niña se me acercó, le dije que se marchara rápido del lugar en el que me encontraba, pues si se adentraba podría encontrarse con cosas horribles que asaltarían sus noches y no dormiría en meses, y, desde luego, no le deseaba eso a nadie. Tengo ganas de llorar, supongo que no noto caer ninguna gota porque ya no queda agua en mi cuerpo, qué triste. Apenas 5 minutos me quedan, lo sé porque cinco hombres blancos han pasado por delante mía y aunque a penas tenga fuerzas para hablar puedo escuchar. Oigo decir a uno de ellos que no merece la pena mi vida repararían gastos en mí, porque estaba prácticamente muerto ya, mandaron a cavar el hoyo en el cual me enterrarían y cuando me fui a dar cuenta, ya no estaban allí. Desde luego me habría encantado poder decirles que sólo necesitaba agua, y un par de medicinas, no pude. Pero bueno, si mi muerte sirvió para salvar alguna vida.. no perdí del todo. Acabo de morir.

Lunes, 13 de enero de 2011:
 Ahora estoy en no sé muy bien dónde, tampoco sé el tiempo que estaré aquí, pero puedo ver el mundo entero, puedo contemplar desde el polo norte hasta el polo sur. Después de vivir lo que he vivido, más bien, después de vivir lo que no he vivido he de decir:
¿Cómo puede ser que mientras una mitad del mundo goza de toda clase de comida y bebida a menos de 500 m, la otra mitad ha de recorrer 2 km para poder transportar una garrafa de agua desde el río "más próximo" hasta la aldea en la que habita?
¿Para eso morí yo? ¿Para enriquecer, de alguna manera, a los más ricos y empobrecer a los más pobres?
Yo creía que el mundo entero estaba igual que yo, nadie se dignó a darme información, ni datos, nada. Ni siquiera sabía de la existencia del dinero, ni de que se derrochaban tantos miles de agua al día, agua por la que yo habría hecho barbaridades, lástima que no me quedaran fuerzas por la ausencia de comida.
Tampoco tenía constancia de que existían medicinas que lo curaban prácticamente todo, ni que en otros países se habían erradicado las enfermedades por las que murió mi hija. Maldita sea.

Domingo, 30 de octubre de 2540:
El mundo se ha acabado, insuficiencia de víveres y derroche extremo de agua. El 60% de personas murió por desnutrición, el 15% por deshidratación. Os preguntaréis qué pasó con el resto de personas, murieron como víctimas de una guerra que se desencadenó a causa de ésto. Ahora no hay humanos y todo, absolutamente todo, es mejor. Las hormigas pueden ya respirar tranquilas, al igual que los siluros u otras especies..

"Los humanos ya no aportamos nada a la naturaleza, sólo la destruimos.."

jueves, 10 de febrero de 2011

Decadencia desesperante, intento de sublevación..

Hablemos de cambios, de inestabilidad y desequilibrio, de por qué y de por qué no, y de la suerte que tenemos.
Podríamos decir que la generación ni-ni aumenta con el paso del tiempo, y aumenta relativamente rápido, podríamos hablar también de que faltan personas y sobra gente, faltan buenos actos y sobra estupidez, falta caridad y sobran perjuicios, si bien esto es algo que todos tenemos en cuenta siempre y nadie hace nada, nos dejamos el cuerpo muerto ante situaciones vergonzosamente injustas, ponemos etiquetas y dejamos que nos las pongan. Así es como se forma la discriminación, discriminación que aumenta hasta el punto de llegar a las agresiones verbales, psíquicas e incluso físicas y nadie hace nada, normal que así el mundo vaya como va, y que ésto sea cada vez más alarmante.

¿Por qué dejamos que sea ésto así, por qué no hacemos que ésto cambie? 
Indiferencia, para muchos supongo que ésta palabra será lo suficientemente clara y concisa, pero lo desarrollaré un poco, ¿Por qué tanta indiferencia? Porque estamos cansados, y mirad que son pocos años y mirad que "somos muchos los que queremos cambiar la situación, somos muchos los inconformistas.." Supongo que es algo que no llegaré a entender, o quizá es que soy demasiado pequeña y todavía no he visto nada de la vida. Yo quiero hacer algo para cambiar las cosas, quiero poder decir que me gusta leer, o que me gusta ver anime o escuchar heavy o lo que sea, sin que nadie me diga que es extraño. Me gustaría ver cómo la humanidad vive y deja vivir. Me gustaría también ver cómo los diferentes estados que ahora están en guerra, apliquen lo de: "Dos no se pelean si uno no quiere.."

En fin, son tantas cosas la que hay que cambiar que quizás sea por eso por lo que dejamos pasar las injusticias y nos dedicamos a vivir sólo nuestra vida, que, a veces, ni siquiera logramos hacerlo como deberíamos y como realmente queremos.

Tenemos suerte, mucha suerte y la suerte es únicamente vivir donde nos ha tocado vivir. Si los fetos tuvieran el cerebro formado y pudieran ver antes de salir de la barriga de la madre más de uno decidiría quedarse donde está y no salir de ahí jamás. Nos toca ver, por ejemplo que aún estando en pleno siglo XXI, que, por cierto, pienso que lo del siglo XXI es una chorrada, porque sí, estaremos en éste siglo y tendremos mucha tecnología pero no la aplicamos como debemos, millones de personas siguen muriendo al año de hambre cuando los supermercados tiran la comida que les sobra y no se podrá vender, la arrojan a un cubo de basura, lo tapan y sellan para que nadie de los que, de verdad, les serviría esa comida la pueda aprovechar, y que, por culpa del dinero, mejor dicho, de la ausencia de éste, no hayan tratamientos para enfermedades que ya están erradicadas en el 1º mundo y que por consecuencia deberían estarlo también en el 3º. Maldita sea, ¿Qué más les da?

Visto está pues que es el dinero es el que manda, sin dinero no hay comida, sin comida, muerte y la muerte, al fin y al cabo, es sólo un signo que indica que, antes o después, hubo vida.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Hablemos del término "normal"

Me gustaría poder hacer una lista con el canon social general que nos envuelve últimamente, pero no, no lo haré, no me gusta, no quiero. Porque hoy en día lo normal es meterse en la vida de todo aquel que llame algo la atención, meterse en la vida de todo el que no sea normal, que por defecto suelen ser freaks, heavys o cualquier otra cosa por el estilo. ¿A quién le gusta ser normal?

sábado, 5 de febrero de 2011

Media muerte y dos vidas..

Otra vez la vi, las paredes seguían blancas y oscuras se tornaban cada vez que ella dejaba de respirar. Otra vez la vi, y noté el frío de los barrotes que rodeaban su cama a modo de red, para que no volviera a caer. Otra vez la vi y no pude aguantar la lágrima que caía por mi mejilla, ésta vez no, no pude aguantar la esperanza, cayó, y nadie pudo impedir que chocara con el suelo y que las ilusiones, otra vez, flaquearan.. Es cierto, no hay más que ver, el tiempo está demasiado ocupado en consumir a la mujer que un buen día me dio la vida, la mujer que, ahora, muere, sin remedio alguno..

Vida mía, ¿Qué has hecho tú para merecer esto?, ¿Quién puede querer que tu hermosura, cada vez más endeble, caíga en las zapas de quién sabe qué y por qué? -decía mi padre, cada vez más resignado-

Sexto y último día, si antes la esperanza era la aguja que cabía, y se escondía, en un pajar.. ahora la aguja pinchaba a la esperanza, la anulaba hasta el punto de acabar con ella, con ella y con su casero, ahora pálido y escuálido, tirado en la silla, ante una nueva derrota..

"¡Dios, escúchame a mí, ya que con mi mujer no lo has hecho!, ¿Por qué?, ¿Por qué a ella?, ¿Existes?, ¿Si existes por qué dejas que muera, eh, por qué?"

Nuevos gritos, más sollozos, quizás yo debía gritar también.. Y si era así.. ¿Por qué no lo hacía..?

jueves, 3 de febrero de 2011

Ganas desganadas de vivir..

Tengo un sueño imperante y unas ganas de vivir tímidas que sólo afloran cuando el sol asoma por la rendija de la ventana de mi habitación, aún solitaria y fría.. Tengo una Vida que utilizo de vez en cuando, y cuando no lo hago la meto en la caja que hay debajo de mi cama, la caja de los desechos, en la que están también los fracasos y las decepciones. Cuando saco a la Vida a pasear para que no se oxide, salen, sin querer, una pequeña parte de las frustraciones pasadas en forma de aire, aire que al poco tiempo después llena mis pulmones e inunda mi cuerpo, sin yo quererlo, se acumulan al paso de los días, y cuando menos me lo espero, cuando estoy apunto de sacar a la Vida a flote durante unas cuantas semanas e inclusive meses, con algo de suerte.. ¡Zas! Aparecen de nuevo esas malditas sensaciones que algún día debieron morir con mis desganadas ganas de existir..