jueves, 1 de julio de 2010

¡Cállate!

30/04/23


Me levanté a las cuatro de la madrugada, pues no podía dormir, el día había sido tan difícil, ella no dejaba de hablar de mi "desviación" mientras que yo hacía las tareas que, poco tiempo antes,
me había mandado intencionadamente para que no cogiera el ordenador en el que me hubiera gustado relatar este suceso, fui a la cocina, sólo me apetecía beber algo sin sabor, me decidí por el agua
tampoco es que tuviera gran cosa, volví a mi habitación, pequeña, oscura y poco acogedora aún así, era la única que me trataba bien en casa, era la única que me dejaba hacer lo que yo quería de vez en cuando, sólo cuando estaba sola, era la única que me permitía escribir hasta altas horas de la madrugada, la única con la que me podía desahogar aunque fuera en sus paredes, ansío volver a estar entre esos cuatro muros cerrados que me aportaban seguridad dentro de mi jaula en los buenos y malos días, supongo que te pregutarás que dónde estoy si no era en mi casa, puesto que apenas me dejan salir de ahí, te lo diré, estoy en la cárcel, con 23 años, aquel dichoso día marcó mi vida, la suya más que la mía. ¿Que qué hice? Esa noche fui libre verdaderamente y aún hoy lo sigo siéndo, ahora soy verdaderamente feliz. Pensarás que estoy loca, estoy en la cárcel, ¿Cómo puedo ser feliz?, ¿Cómo puedo ser libre? Verás, la libertad está en mi expresividad, si me dejan gritar soy feliz, soy libre, si me dejan hablar soy feliz, soy libre, si me dejan protestar y reivindicar soy feliz, soy libre, cosas sin importancia que antes no podía hacer, ahora la hago sin problema. Ah, todavía no te he dicho qué hice.. maté a mi opresora y mi dictadora, sí, esa noche las cadenas que me ataban se convirtieron en cartas de bienvenida al mundo de las responsabilidades, deberes y exigencias, mundo de competividad, de peleas, de VIDA de SUEÑOS de METAS, esas que dentro de un año podré alcanzar, mundo de trabajo y trabajadores, donde sólo los mejores brillan, donde sobrevivir es lo que importa. Esa noche ya alcancé una de ellas, uno de los millones de relatos imaginarios de los que tenía se hizo realidad, lo adjunto:

"Calla, poco a poco, sangre corre, escúchala, conmigo no lo haces" 12/07/10

"Como muchas otras veces, en esta vida, has de callar y dejar que te pisoteen una y otra vez y es que no hay nada que diga que todos somos iguales
y que nadie es más que nadie, y si lo hay, ciertas personas se lo pasan por donde yo sé y muchos os imagináis, por eso, acostumbro a callar y luego repetir, cuando estoy sola…
Hay veces que te cogería y te retorcería, haría un zumo con tu sangre, te recompondría y haría que te la bebieses haciéndote creer que es un “zumo de frutas”
le metería veneno y haría que volvieras a morir otra vez, así cientos de veces, de una y otra manera. Haría con tu sangre el más desgarrador y violento
de los cuadros, te diría lo que nunca me atreví a decirte por miedo a que tu mano se alzara como la de una dictadora, corrupta e intratable, atravesar tu cabeza con una
daga de longitud incalculable, como tú haces con mis sueños, metas e ilusiones, poco a poco, día a día.
Creer que no duele, que lo haces por mi bien, que lo entenderé, ¿sabes lo que pasa? Que ya entiendo todo lo que he de entender, me adelanté a mi tiempo, ¿Y qué? Eso
que gano. Me alegro ¿Sabes? Después de todo no está tan mal, me gusta estar con quien estoy, me tiene que gustar a mí, tú morirás (posiblemente) antes que yo, no te deseo la muerte,
porque al fin y al cabo sigues mandando en mi vida, no te deseo la muerte inminente, deseo nuestro distanciamiento total y parcial lo antes posible. Te puedo jurar sin ningún temor a
romper mi juramento que algún día te daré en las narices, seré independiente, tendré mi vida como YO QUIERO, como A MÍ ME GUSTA porque es mi vida, MI VIDA."


Lo volvería a hacer, aquí tengo tiempo para hacer todo lo que quiero, fuera me esperan así que no tengo prisa, sólo me queda un año, sólo uno, y os tendré a todos de nuevo, todo me tendréis a mí. Cuando

presté declaración de los hechos dejé claro varias veces que lo hice consciente y que estoy cuerda, totalmente cuerda, cosa que los informes psiquiátricos corroboraron, ahora, después de tanto tiempo me pregunto, ¿Por qué a mí, que maté en defensa propia, al fín y al cabo, me meten en la cárcel y a ella, que fue la opresora de mi libertad, de mis sueños nunca le hicieron nada? Recuérdo incluso, que muchas veces, cuando denuncié mi caso, ya siéndo mayor de edad, le dieron apoyo, ofreciéndole cuidadoras y curas para mi "purificación" y mi exorcismo inminente. ¿Tiene una madre derecho a la explotación de sus hijos? ¿A decir que no tienen intimidad? ¿A quitar puertas de habitaciones para tenerlos las 24h del día vigilados? ¡Venga hombre!

¿A mí quién me paga las noches en vela, en las que mi cara parecía más un grifo que nada? ¿Quién me paga las veces que callé por miedo a ofender cuando ella lo hacía siempre y sin descanso? Después de lo que me costó encontrarme, después de lo que me costó ser yo..

Volvería a descuartizarla, lo prometo, palabra del niñito jesus :D

1 comentario:

- dijo...

Chica, pues no sabía que tenías un blog. Pues yo también te sigo. ale